Y esta semana, el tema estrella es el asunto griego. Como quizá esteis un tanto confusos con el concepto en si, intentare explicarlo de forma lo mas clara posible: ¿Que es un griego?.
Por definición, uno que vive en Grecia. En plan coloquial, que te pongan de culo y te lo taladren. Y siendo realistas, en esta semana los griegos podrían encuadrarse dentro de ambas definiciones, porque el teatro que se han montado entre el banco europeo y los nuevos gobernantes de Tsiriza para intentar salvar una imagen de inflexibilidad, cada vez mas deteriorada por ambas partes, a quienes están jodiendo de verdad es a los ciudadanos y ciudadanas del país heleno, que no pueden disponer de su efectivo y por tanto hacer frente a cualquier necesidad básica. Sin cariñitos ni vaselina. Y todo para que dentro de una semana se llegue a un nuevo acuerdo, (veremos hasta cuando) y vuelta a empezar. Una elipse que lleva ya tiempo repitiéndose.
Ya se anuncian cesiones por ambas partes y es evidente que a pesar de la pantomima del referéndum programado para mañana, cuyas preguntas son aun mas ambiguas que las que se formularon en el catalán, ( Los políticos están convirtiendo no mojarse por si hay que dar marcha atrás en todo un arte), no hay que ser muy listo para saber como va a terminar esto. Grecia seguirá perteneciendo a la Zona Euro, porque no son los políticos quienes dirigen los destinos de los pueblos, si no los poderes económicos. Y a estos no les vendría muy bien el mal precedente que podría crear la salida por la puerta de atrás de un país miembro, (no de Grecia, exactamente, que con el peso que tiene a nivel internacional, podrían darles por el culo, pero teniendo en cuenta el referéndum aprobado en Gran Bretaña con la misma idea para el año que viene, quizá no seria buena idea constatar que existe vida sin la respiración asistida de esa ficción que se hace llamar Mercado Comun europeo), cuando realmente, posiblemente la mejor opción para ellos sea, precisamente, volver a una moneda que pueden devaluar para hacer su principal fuente de ingresos, el turismo, mas competitivo. Y de paso, se ahorran la pasta que les supondría pagar una deuda a la que de cualquier forma, no van a poder hacer frente en varias generaciones.
De modo que todo terminara como ha empezado, pero entre medias, el ciudadano de calle es quien las esta pasando putas por un juego de trileros cuyo único fin es seguir en su seguro y privilegiado puesto todo el tiempo que sea posible.
¿Es una mala experiencia que deberíamos aplicar en nuestro suelo patrio?. Pues si comparamos datos de poblacion, PIB, paro...Yo si tuviese dinero en el banco, lo sacaría y lo guardaría debajo del colchón y que el corralito se lo coman los demás. Y si no, pues ya sabéis, vaselina. Porque lo que es innegables es que darnos, nos van a dar.