No queremos ser Venezuela

   No lo puedo evitar, me causa extrañeza los comentarios que a veces se oyen cuando el argumento es Podemos, (que como mínimo hay que reconocerles el logro de haberse colocado como tema principal en las tertulias de los bares, por encima incluso del fútbol), dando por seguro que si ganan las elecciones, pasaremos a convertirnos de la noche a la mañana en un país caribeño, mas concretamente Venezuela y por supuesto eso es algo que no queremos.

    Cuando uno inocente pregunta perplejo, ¿Por que?, (fijaos el matiz, no lo niegues ni lo afirmes, solo pregunta porque no queremos ser Venezuela y veras que risa), después de un par de maniqueísmos inconsistentes, se volverá a hablar de fútbol.

   No es mala leche, sino falta de información que busca rellenar esas carencias con las agudas observaciones de quienes aseveran que, sin duda, eso supondría el caos mas absoluto y la bajada a los infiernos como país, e individualmente como ciudadanos, pero nadie es capaz de responder a una pregunta tan simple, excepto con algún recitario de los que intenta endosar este gobierno alegremente y que a veces por lo visto, llega a colar.

   No tengo idea como sera la vida del venezolano medio, pero aquí, en mi país, hace ya tiempo que no bajamos de cinco millones de parados, que el poco trabajo que hay, es cada día mas precario y mal pagado, lo que ha conseguido que seamos la Tailandia europea, ideal para los grandes empresarios, pero no tanto para quienes se matan a trabajar horas y horas sin un sueldo que les permita vivir y mucho menos un contrato en condiciones, (ahora lo de la seguridad del puesto laboral tiene mas de ciencia ficción que los viajes en el tiempo).

  En mi país, los dos grandes partidos acaparan casos de corrupción tan vergonzosos que probablemente se castigarían hasta en Sudafrica, incluyendo tarjetas opacas, cacerías y muchos otros lujos inconfesables a cargo el erario publico, por no mencionar, la financiación ilegal de los mismos ya señalada fehacientemente por los jueces y los sobresueldos y sin embargo, ninguno de los implicados ha pisado la cárcel y todos consideramos normal que no lleguen a hacerlo.

  En mi país, desaparece misteriosamente documentación vital  para la investigación de estas corruptelas y se ve tan normal como que los grandes estafados por una crisis bancaria que hemos estado pagando todos, tengan que manifestarse día si, día también, a pesar de ser la mayoría de ellos  de la tercera edad, con mas posibilidades de morir en la calle que recuperar sus ahorros, diluidos en lujos extravagantes de ladrones colocados a dedo, cuya codicia parece no tener fondo.

  En mi país la gente se muere por los recortes en Sanidad y Dependencia, mientras los bancos rescatados ya presentan beneficios pero siguen cerrados al credito y el ciudadano de a pie, paga la nomina de miles de políticos y consejeros que ni siquiera serian necesarios para gobernar a los Estados Unidos.

  En mi país, el partido en el gobierno hace uso de sus instituciones como Hacienda o el Ministerio del Interior para atacar a sus adversarios políticos. Presiona a los medios de comunicación para eliminar a quienes son críticos con su gestión y se ha inventado una ley mordaza, gracias a la cual te pueden echar hasta unos cuantos años de cárcel si te manifiestas en la calle.

  En mi país, el poder judicial esta controlado por el poder político y este gano una mayoría absoluta con un programa que no ha cumplido en absoluto

  En mi país, cada día es desahuciado alguien de una vivienda que pasara a manos de un banco que la dejara pudrirse vacía, mientras que sus inquilinos tendrán que dormir en la calle, intentando que no les pillen porque eso también conlleva multa.

  En mi país cada año aumenta la pobreza infantil y los bancos de alimentos y las asociaciones de caridad no dan a basto...

  Insisto, no se como se vive en Venezuela, pero visto en perspectiva, quizá sean los venezolanos quienes no deseen ser España. (O creéis que en Venezuela no hay ricos y pobres?)